Inevitablemente mis recuerdos se disparan con esta imagen, aún recuerdo cuando era una niña y ayudaba los veranos a vender los tomates, calabacines… que mi padre recogía del campo tras mucho esfuerzo y trabajo y como mi madre me dejaba encargada de atender a las señoras que se acercaban a casa a comprarlos recién cogidos del huerto…
Ahora con el tiempo, lo recuerdo de forma entrañable y me despierta muchas emociones, entendiendo como de esta forma ayudábamos a la economía familiar.
En Gambia existen numerosas plantaciones de cacahuetes, cacahuetes que son increíblemente sabrosos y que se utilizan además para muchos platos típicos como la “domoda” entre otros, dando sabor a sus deliciosas salsas, mantequillas …. Forma parte de la alimentación local y es muy típico su venta en las calles, rellenando pequeñas bolsas o botellas de plástico y a precios más que económicos.
Gambia ya antes de la pandemia estaba situado en la posición 172 del IDH, según el último informe de Naciones Unidas de 2020. La situación de vulnerabilidad del país durante la pandemia se agudizo, minorando aún más su crecimiento y una de las todavía no muy potenciada fuente de ingresos del país, como es el turismo.
Nos gustaría muy poquito a poco, poner nuestro granito de arena para que podáis ir conociendo más este país y sus muchas posibilidades y porque no, incentivando vuestra curiosidad, siempre desde una visión del respeto a la cultura local y desde una perspectiva del turismo sostenible.
Os dejamos hoy está imagen de dos herman@s en un puesto típico de la calle.
